Sus mismos compañeros le han pedido la dimisión y él ha cedido. Pere Bové, presidente del Consejo Regulador de la DO Terra Alta, ha comunicado que dejará el cargo por las presiones internas, puesto que el resto de los miembros de la junta le han pedido que se marche sin especificar el motivo. Después de dos días de tensiones a raíz de la publicación al Vadevi de una auditoría que revelaba irregularidades del mandato anterior –que no afectaban los actuales dirigentes de la corporación–, el Consejo Regulador ha emitido un comunicado de crítica al trabajo periodístico de este diario, se ha lamentado de la filtración del documento y, sin ninguna otra explicación, ha pedido la dimisión de Bové.
En declaraciones a la ACN, Bové ha anunciado que dejará el cargo, que ocupa desde hace un año, a pesar de subrayar que él no tiene nada que ver con la «filtración» –en referencia al hecho que Vadevi haya tenido acceso a la auditoría– que indigna sus compañeros. El presidente dimisionario ha asegurado que está «muy sorprendido y muy triste«.
«Me hacen dimitir sin motivo»
«Me hacen dimitir como presidente de la DO Terra Alta sin motivo, sin razón, porque no he hecho nada», ha remarcado. Bové asegura, incluso, que a él mismo le costó acceder a la auditoría, sobre el ejercicio del 2022, y que no la pudo ver hasta hace dos semanas. El informe fue encargado por el equipo de gobierno anterior y Bové ha tardado «meses» a tenerlo, cosa que le parece «una falta de respecto a la presidencia de una entidad de derecho público tan importante como es un Consejo Regulador». Según relata, cuando finalmente tuvo acceso, informó el resto de la junta.

Semanas después, cuando el contenido de la auditoría se ha hecho público, esta junta ha reaccionado reclamando la dimisión de Bové por motivos que oficialmente no se expliciten. Fuentes del Consejo Regulador han asegurado a ACN que no obligan a dimitir a su presidente porque le atribuyan la filtración, pero no aclaran cuál es el motivo. Bové ha admitido que para él «es un día muy triste» pero que tiene «la conciencia muy tranquila», y ha decidido continuar como vocal de la junta, aunque deje la presidencia «por respecto a la institución».
