El Gobierno de la Generalitat considera que el ERTE que quiere solicitar el Grupo Freixenet no es «de fuerza mayor«, dando así la respuesta que se esperaba desde hace una semana, cuando la marca de vinos y cavas anunció esta petición para afrontar la bajada de producción provocada por la sequía. Ante la negativa, la marca ha anunciado que «continuará con las negociaciones constructivas sobre el ERTE con el comité de empresa y con los sindicatos». Según ha compartido en un comunicado, «aceptan» la decisión de la Generalitat, pero se «mantienen firmes en la necesidad de un ERTE y en que las condiciones climáticas y la respuesta del Gobierno catalán desencadenan una solicitud de un ERTE ETOP por razones económicas, técnicas, organizativas o de producción».
Todo ello, justifican, porque «el motivo de la solicitud original del pasado 22 de abril de 2024 continúa vigente«: y hablan de la falta de uva y vino base para la producción de Cava, que según la marca, «conduce a una reducción masiva del trabajo en los procesos de producción». Un contexto que viene provocado como «consecuencia de la sequía extrema en las comarcas del Alt Penedès, Baix Penedès, El Garraf y Camp de Tarragona, que ha vuelto a confirmarse en el Índice Precipitación Estándar del 31 de marzo de 2024 del Servicio Meteorológico de Cataluña (METEOCAT) y que ha continuado afectando cada vez más al sector desde 2021″.
Medidas insuficientes para evitar un ERTE
Desde entonces, recuerda Freixenet, han instado la DO a actualizar la normativa del Cava y a adoptar medidas para contrarrestar la tensa situación de suministro. «Aunque la DO aprobó medidas extraordinarias a mediados de abril para la próxima cosecha, estas medidas no son suficientes ni llegan a tiempo para evitar un ERTE». Los datos, según la marca, lo avalan: «Mientras la sequía ya ha acumulado un déficit equivalente a 80 millones de botellas en el sector del Cava, Grupo Freixenet está comprometido a satisfacer la demanda de los consumidores a corto y mediano plazo».
Grupo Freixenet, que produce un tercio del sector del Cava y que vende además de un centenar de países del mundo, tiene como misión -apunta- «asegurar un crecimiento sostenible para sus empleados, proveedores y toda la industria vinculada en el Cava». Por eso, «continuaremos trabajando con todos los agentes implicados para encontrar la manera de superar este reto que afecta gravemente en todo el sector».