Cada 25 de diciembre, en miles de hogares catalanes, la mesa se llena con uno de los rituales más queridos del invierno, el cocido y carn d’olla. Un caldo profundo, lleno de matices, que combina la dulzura de las verduras, la rusticidad de las carnes y la textura reconfortante de la pasta o la pelota. Ante un plato tan completo e identitario, el debate sobre qué vino marida mejor a menudo está abierto. Sin embargo, los espumosos -tanto blancos como rosados– emergen como una opción sorprendentemente acertada, capaz de respetar la tradición y, al mismo tiempo, aportar un toque de frescura festiva.
La clave de este maridaje es la versatilidad natural de los espumosos jóvenes o de crianza moderada. Su burbuja fina y vivaz actúa como un limpiador del paladar, refrescándolo después de cada cucharada de un caldo intenso y caliente. En el caso de los blancos, elaborados con variedades como el macabeo, la parellada o el xarel·lo, su perfil aromático -con notas de manzana, pera, hinojo o flores blancas- encaja muy bien con la parte vegetal del cocido, creando una armonía sutil.
Los rosados, por su parte, aportan un contrapunto ideal para aquellos que prefieren una expresión más afrutada. Los aromas de frutos rojos, frambuesas o fresas confieren un contraste amable con la carnosidad del plato, especialmente con la pelota y las carnes de cerdo o ternera. Además, su estructura ligeramente más amplia ofrece juego para acompañar tanto el caldo como la parte sólida del plato.
Otro factor a considerar es la carga simbólica que tienen los espumosos en el calendario festivo catalán. Son vinos de celebración, de reencuentro y de brindis, e incorporarlos desde el inicio del almuerzo navideño es una manera de enlazar gastronomía y ritual. El cocido, humilde pero solemne, encuentra así un compañero de mesa que suma y no resta, que refresca pero no domina.
A la hora de elegir, conviene apostar por espumosos secos –brut o brut nature– y evitar los más dulces, que no encajarían con la salinidad y la profundidad del plato. Tanto los blancos como los rosados tienen plenamente ganado un lugar al lado de la cazuela humeante. Y es que, en un almuerzo marcado por el peso de la tradición, las burbujas aportan un toque de elegancia sin perder ni una pizca de autenticidad. ¡Buen cocido de Navidad y buenos espumosos!
Vinos espumosos blancos
Elyssia Gran Cuvée Brut
Macabeo, xarel·lo, parellada y pinot noir
Crianza mínima de 9 meses
Grupo Freixenet (DO Cava)
PVP: 9,99 euros

Insuperable Brut
Macabeo, Xarel·lo y Parellada
Crianza mínima de 25 meses
Canals i Munné (DO Cava)
PVP: 12,50

Cygnus Albireo Brut
Xarel·lo, macabeo, parellada
Crianza mínima de 12 meses
U más U (DO Cava)
PVP: 10,95

Vinos espumosos rosados
Elyssia Pinot Noir
100% Pinot noir
Crianza mínima de 9 meses
Grupo Freixenet (DO Cava)
PVP: 9,99 euros

Planas Albareda Rosat
100% Trepat
Crianza mínima de 12 meses
Caves Planas Albareda (DO Cava)
PVP: 10,15 euros

Rimarts Martínez Rosé
Pinot noir, garnacha
Crianza mínima de 9 meses
Caves Rimarts (DO Cava)
PVP: 14,10 euros

