En la comarca del Priorat, territorio de vinos, terrazas y un enoturismo al alza, varios inversores extranjeros han visto un nicho de mercado que puede suplir la ofrerta de hoteles de lujo en la zona. Torroja del Priorat, población de tan solo 140 habitantes, es un ejemplo. La cadena norteamericana Marriot Internacional ha reformado la antigua vicaría del siglo XVIII para abrir el Ora Hotel, un pequeño alojamiento con trece habitaciones. A pesar de la reciente apertura, y según ACN, la dirección ya se estaría planteando ampliar las instalaciones. No son los únicos, porque The Stein Group ultima los últimos detalles para abrir Mas de Bruno este mayo. Complementando esta oferta, en el total de la comarca hay 282 alojamientos turísticos.
Ora Priorat mira a los turistas de alto nivel adquisitivo
El hotel Ora Priorat abrió puertas el mes de octubre pasado. El establecimiento dispone de trece habitaciones y es el primero a formar parte de la oferta de
El proyecto nace con la voluntad, explica, de atraer turistas de alto nivel adquisitivo tanto nacional como internacional hacia la comarca. Y así, descubrir este territorio y sus bodegas. «En la zona, hay hoteles que trabajan muy bien, pero vemos que había una oportunidad para hacer un establecimiento que fuera el hotel del vino, todo pensado alrededor del visitante del vino, que viene al Priorat para conocer o descubrir bodegas, probar buenos vinos, disfrutar de una buena gastronomía y de un paisaje muy singular», comparte Peñas con la agencia.
Alejados de proyectos hoteleros de muchas plazas, Peñas señala que no descartan ampliar el hotel más adelante. Han comprado dos inmuebles en la misma calle para reformarlos en una segunda fase. En paralelo, estudian abrir otro hotel de lujo a Escaladei. «Es un edificio muy antiguo, de estilo noble, del conde de Rius de Tarragona, y tenemos la posibilidad de hacer algo muy singular», apunta el responsable. A pesar de que el proyecto todavía se encuentra en una fase muy inicial y sin calendario, el nuevo alojamiento sería el doble de grande que el hotel Ora.
Mas de Bruno abre puertas este fin de semana
The Stein Group abre este mes de mayo lo Gran Hotel Mas de Bruno, un hotel boutique de lujo rodeado de viña al término de Torroja. El nuevo establecimiento dispone de 24 suites, dos restaurantes, piscina, sauna, entre otros servicios. El jefe de operaciones del grupo, Jesús Heras, explica que arrancarán con trece habitaciones y, que a partir de junio, ampliarán la oferta con once habitaciones más, situadas en el segundo edificio.
«Nuestra idea es dar un servicio de calidad, muy personalizado y poniendo el énfasis a las experiencias y a las actividades del entorno, con una clara intención de dar a conocer las bodegas del Priorat y del Montsant», señala Heras.
Mas de Bruno es una masía datada del 1797 vinculada a una familia que trabajaba por los monjes de la Cartuja de Escaladei. Ahora mismo, es el único establecimiento del grupo hotelero en Cataluña, después de que dirigieran el hotel Florida de Barcelona hace más de quince años. «No hemos trabajado nunca en el Priorat, más allá de las referencias y estudios hechos, nos irá muy bien ver como funciona el primer año y como responde el mercado de Tarragona, Barcelona y la influencia internacional para ajustar las estrategias comerciales», indica Heras.
De hecho, subraya que la apertura de alojamientos de cinco estrellas en el Priorat dará respuesta a turistas que hasta ahora solo pasaban unas horas en la comarca visitando bodegas, los cuales «se perdían», puesto que al final del día volvían hacia Barcelona. También opina que la apertura de los hoteles de lujo es positiva para todo el mundo y considera que los negocios son complementarios. «El turismo en el Priorat va al alza y tener dos, tres o cuatro hoteles de cinco estrellas pequeñitos enriquece la visibilidad de la comarca», añade.
Suelo Dominicata y Hace falta Lobo, pioneros
Tierra Dominicata es lo primer hotel de lujo del Priorat. Sus propietarios, cuatro hermanos, reformaron una antigua granja de los monjes cartujos situada al parque natural del Montsant, al término de Escaladei, para ubicar 26 habituaciones. Después de reconstruir los dos edificios «históricos» en ruinas abrieron el establecimiento el julio de 2018, el cual está rodeado de 20 hectáreas de viña. Quince años antes, sus impulsores habían puesto en marcha la bodega Trozos del Priorat en Gratallops y un alojamiento «pequeño» vinculado al enoturisme.
Uno de los copropietarios de Tierra Dominicata, Enrique Vives, explica que los inicios fueron «difíciles» porque el destino era poco conocida. Además, toparon con las restricciones de la pandemia. Aun así, afirma que la ocupación creció progresivamente, puesto que durante la covid el mercado catalán descubrió la comarca. «Desde entonces, hemos ido aumentando y el proyecto está consolidado, estamos contentos con el resultado», remarca. En paralelo, voz con buenos ojos la apertura otros alojamientos de lujo en la zona dado que atrae más público. «El importante es que la oferta sea de calidad, que todo el mundo entienda que el que hace atractivo el destino se tiene que mantener e intentar que sea un destino no masificado, de tranquilidad, desconexión y de paz», sostiene.
También fueron pioneros los propietarios de Hace falta Lobo cuando abrieron el hotel en Gratallops hace unos 20 años. Se enamoraron del Priorat y dejaron Madrid para trasladarse en el municipio, donde compraron una casa señorial prioratina del siglo XIX, abandonada desde los años 50. Así, reformaron el edificio y lo convirtieron en un establecimiento de diez habitaciones. «El año 2004 era durísimo, no había prácticamente alojamientos, solo un hotel en Falset», exprés Cristina Jiménez, directora del hotel. «Fuimos de los pioneros a atrevernos a la maravillosa aventura que es la enoturisme y hacer descubrir la comarca a la gente en un ambiente agradable y bello», añade.
Ante la apertura de hoteles de lujo, Jiménez opina que el crecimiento es bueno siempre que se haga de manera sostenible y evitando la masificación. «Tenemos que trabajar por un turismo responsable porque la maravilla del Priorat es esta cosa, es la joya de la naturaleza y no nos la podemos cargar, crecimiento sí, pero ordenado y reflexivo», valla la hotelera.
Más servicios para revertir el despoblamiento
El alcalde de Torroja del Priorat, Joan Sentís, celebra la llegada de los nuevos hoteles porque suponen dinero para las arcas municipales y han dado trabajo a personas del territorio. A la vegada, opina que tienen cabida más establecimientos de lujo en la comarca. Sintiera lamenta que el pueblo no tiene tiendas, casal social o restaurantes y bares para atender las necesidades de los vecinos y atraer de nueces. «Torroja es un pueblo muy bonito, pero nos faltan servicios», expone.
Según el alcalde, de los 200 inmuebles que hay en el pueblo, el 60% son segundas residencias, el 25% es vivienda habitual y el resto son edificios municipales o bien en ruinas. «Tenemos cuatro inmuebles para rehabilitar y destinarlos a vivienda social, la inversión es de más de 2 millones de euros, lógicamente ni con 25 años de subvenciones lo acabaremos», afirma. Por eso, reclama a las administraciones superiores más flexibilidad en los trámites burocráticos y más ayuda económica para revertir el despoblamiento. El alcalde no quiere que la población se convierta en un municipio solo de fines de semana y de verano.
Por su parte, el presidente del Consejo Comarcal del Priorat y alcalde de Gratallops, Xavier Gracia, destaca que los vinos que se hacen en el Priorat son reconocidos internacionalmente y que su prestigio ha contribuido al hecho que grupos hoteleros e inversores estén apostando por el territorio. Gracia asegura que la comarca está abierta a recibir todo tipo de turistas, pero siempre desde el equilibrio territorial y alejado del turismo de masas. » tenemos que poder convivir, sin que haya especulación en cuanto a vivienda; es bueno que haya este tipo de alojamiento y enoturisme algo más calificado», subraya.
Aumentan los alojamientos turísticos
El año 2005, había 51 establecimientos en el Priorat. De estos, 14 eran hoteles, 3 campings y 34 casas rurales, según datos facilitados por el Consejo Comarcal del Priorat. En global, suponían 1.326 plazas. Cinco años más tarde, los alojamientos se incrementan y suman 66. En este periodo aumentan en manantial los hoteles y las casas rurales, los cuales se cifran en 19 y 44, respectivamente. El año 2015, la situación cambia con la apertura de un apartamento turístico y la puesta en marcha de 67 viviendas de uso turístico. Se mantiene el mismo número de campings y de casas rurales, pero los hoteles continúan al alza y se sitúan en 20.
El 2020, en plena pandemia, la oferta turística solo aumenta en dos hoteles y se sitúa en 22. El año 2021, los establecimientos turísticos suman 243 y su crecimiento se debe al incremento de las viviendas de uso turísticos que se ensartan hasta los 169. También se abre un segundo apartamento. En abril de este año, la comarca tiene un total de 282 alojamientos y 2.871 plazas. Concretamente, 24 hoteles, 3 campings, 47 casas rurales, 2 apartamentos y 206 de viviendas de uso turístico.