La rotura de dos depósitos plenos de vino en la localidad portuguesa de São Lourenco do Bairro resultaron en imágenes espectaculares del pueblo inundándose de vino tinto. A causa del accidente, unos 2,2 millones de litros corrieron calle abajo del pueblo, creando uno
Una riada roja recorriendo el pueblo
El derrame, originado en bodegas Levira, tuvo lugar este pasado domingo e inundó las calles del pueblo, con sus habitantes observando la marea roja absolutamente boquiabiertos. La cantidad de vino esparcida por la localidad fue bastante grande como para llenar una piscina olímpica casi hasta arriba e hizo que las autoridades locales decretaran una alerta medioambiental y se pusieran en marcha acciones para desviarlo y que no llegara al río Certima, muy próximo.
Los bomberos desviaron el vino para que no llegara al río
Los bomberos de Anadia montaron un operativo por bloquear el flujo de vino y desviarlo del río para que fuera a parar en un campo sin causar más problemas. Ellos mismos han informado que el sótano de una casa cerca de la bodega quedó totalmente inundado de vino. Levira, por su parte, ha pedido perdón por los hechos y se dedicó a limpiar los suelos llenos de vino.
La bodega asume la responsabilidad y se hace cargo de los daños y la limpieza
En cuanto al accidente, la bodega también ha declarado que «asume la responsabilidad llena» de los costes asociados tanto a la limpieza del vino como la reparación de los daños causados y que tiene equipos de personal disponible para hacerlo de manera «inmediata». «Estamos comprometidos con resolver esta situación de la mejor forma posible», concluyen.