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El trepat, una variedad delicada, expresiva e identitaria de la Conca

Esta semana los vinos de la Conca de Barberà han vuelto a ‘concarir‘ Barcelona. Lo han hecho en la ya tradicional encuentro a la Casa Capell en la cual se reunió una amplia representación de los productores del territorio que han aprovechado para dar a conocer sus novedades o sus últimas añadas vinícolas. No ha faltado los vinos de trepat, variedad estrella de la región.

La variedad, segundos elaboradores y prescriptores

El diccionario del vino introduce varios conceptos en la hora de definir la variedad trepat. Dice que es una variedad de uva negra que predomina en la región de la Conca de Barberà, «de dónde es autóctona», y que es vigorosa y con grandes y compactos racimos. Apunta que es de brotación temprana y maduración tardía y muy sensible a las heladas de primavera, a pesar de que, en cambio, se muestra bastante resistente a la botrytis. Su proceso de elaboración mujer vinos de moderada graduación alcohólica, frescos, ligeros y afrutados.

Escapando de la teoría más académica, y preguntados a varios profesionales vinculados al sector del vino catalán, han surgido otras maneras de explicar el trepat que recogemos a continuación.

El presidente de la DO Conca de Barberà, con Marta Pedra de Vinos de Piedra | Foto: E.V.

Ancestral, expresiva y el elixir de la Cuenca

«Es una variedad ancestral que hemos sabido adaptar a los nuevos tiempos», compartían desde la bodega Cara Norte; «un vino sencillo, suave y expresivo, con mucha delicadeza y perfumado, dicen desde el estand de Vidbertus, y un elixir«, apuntará el propietario de esta bodega que precisamente ha etiquetado uno de sus monovarietals de trepat con este nombre.

«Creo que es una variedad demasiado desconocida«, lamenta la sumiller Rosa M del Castillo. Ella guía de varias clases de cata y comparte que a las clases cuando sirve un vino de trepat los y las alumnas siempre se sorprenden. «Creo que puede ser la excusa perfecta para entrar en contacto con el mundo del vino», dirá.

Sea un vino más o menos conocido, está claro que en los últimos años se ha hecho un trabajo muy importante en cuanto a identificación de territorio. «Poca gente hay quién conozca el trepat y no sepa que su entorno natural es la Conca de Barberà», añadirá el sumiller Felipe Urbano. «Es identidad, y así lo han sabido aprovechar los de la zona que utilizan una impronta como símbolo y sello de los vinos que se elaboran». «El camino que sigue la trepat es un sueño hecho realidad», compartirá el comunicador e ilustrador Jordi Català.

Vinos de trepat que se sirvieron durante la sesión guiada | Foto: E.V.

La jornada, con 250 personas

La cita de Casa Capell reunió alrededor de 250 profesionales del sector de la restauración y la hostelería, prensa especializada, prescriptores y sumilleres. Había 19 bodegas y más de un centenar de vinos que se pudieron descubrir entre las 16:00 h y las 20:00 h de la tarde.

Entre las bodegas participantes, estaban Abadía de Poblet, Cara Norte, Bodega Carles Andreu, Bodega Plana de la Masó, Bodega Rendé Masdéu, Castell de Oro, Bodega Vegana Aixalà, Clos Montblanc, Josep Foraster, Vinos Concha, MyDolia, Bodega Vilalta Pere, Gabor Celler, Gerida Vinos, Bodega Rosa Mª Torres, Vinos y cavas Portillo, Mas de la Pasa, Vinos de Piedra y Bodega Vidbertus.

Coincidiendo con la jornada, también hubo una cata por cinco vinos del territorio guiado por sus elaboradores. Se sirvió y comentó el Picapiedra Negre 2022 de Vins de Piedra; Cara Nord tinto 2021 de Cara Nort, el Elixir Negre 2021 de la Bodega Vidbertus; Pep Negre 2021 de Josep Foraster; y Mas de la Pansa – Dolç 2019, de la bodega Mas de la Pansa.

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