Los Premis Vinari de Enoturismo acontecieron un concurso independiente en 2022 porque el sector enoturístico catalán lo clamaba. Hasta entonces, se había considerado una categoría más dentro del certamen que reconoce anualmente los mejores vinos catalanes, pero la realidad hizo que se entendiera como un proyecto con entidad propia, un proyecto que admitía muchas más divisiones que las propiamente vinculadas a una bodega o a un proyecto directamente ligado con la elaboración de vinos.
Y es que el turismo del vino ha hecho un salto a la vez cuantitativo y cualitativo en los últimos años. Se ha hecho lugar en muchos proyectos que lo han entendido como complemento al negocio original, sea cuidar las viñas y elaborar vinos o alojar turistas que hacen una escapada en el territorio. El caso es que esta visión amplia y diversa ha permitido que el certamen vuelva en esta segunda edición con más fuerza y permita seguir premiando la excelencia y destacando unos atributos que suman nuevos atractivos en Cataluña como país íntimamente ligado a la cultura del vino.

Ayuntamiento de Vilafranca y Escuela de Enoturismo
Los Vinari de Enoturismo nacieron gracias al apoyo inestimable del Ayuntamiento de Vilafranca y del Escuela de Enoturismo del municipio del Penedès. Con la entidad pública, la alianza viene de lejos y hay que buscar los orígenes en el concurso de vinos, pero el centro formativo de referencia en este sector sumó un conocimiento imprescindible para desarrollar el certamen con todas las garantías. La directora de la Escuela, Ester Garcia, es además miembro del jurado que evalúa las candidaturas presentadas, junto con otros profesionales que aportan su pericia en el ámbito para dibujar los podios anuales del concurso.

De ruta, con Nissan Eléctrico
Los Premios Vinari renuevan un año más el acuerdo con Nissan, que continúa siendo lo coche oficial. La marca, colaboradora histórica del concurso de vinos catalanes, suma sinergias con el sector vitivinícola desde su vertiente más sostenible y ecológico. De hecho, a lo largo de varias ediciones ha patrocinado el premio al mejor proyecto ecológico; y en estas dos ediciones de los premios de enoturisme se suma para colaborar en la promoción y visibilidad a los proyectos de el turismo del vino de Cataluña.
Nuevos altavoces a las actividades de turismo del vino: Turismo de Barcelona
Turismo de Barcelona es una de las entidades que más trabajan para dar a conocer las bondades de Cataluña a través del turismo. Y no son ajenos al boom que vive el enoturisme. Por eso, en línea con sus objetivos estratégicos, se suman a los Premios Vinari para enriquecer todavía más la oferta y contribuir en la difusión de unos productos, experiencias y actividades que explican el país desde otra mirada. En su caso, siempre vinculado en las comarcas barcelonesas, que ciertamente permiten abrazar actividades en territorios históricos del vino como son Alella, el Penedès o el Plan de Bages.
Patronato de Turismo de la Diputació de Lleida, Ara Lleida
Lleida tiene mucho que decir también en cuanto a enoturisme. De entrada, tienen activa su Ruta del Vino vinculada con la Denominación de Origen Costers del Segre que permite vivir el territorio a través de propuestas múltiples y a menudo desconocidas. Ahora Lleida se suma también a los Premios Vinari de Enoturisme para aportar más valor a un proyecto y a un sector que ha acontecido clave para enriquecer su economía, pero sobre todo cultura y territorio. Ahora Lleida repite al equipo de colaboradores de este concurso.

Colaboraciones excepcionales: Llopart y Xerigots
La edición 2023 de los Vinari de Enoturisme cuentan con el apoyo especial de dos proyectos con solera. Por un lado, Llopart, uno de las bodegas de más larga tradición vitivinícola del Penedès, que este año será suyo del certamen por el hecho de haber estado, el año pasado, el ganador del premio a la mejor iniciativa innovadora. De la otra, Xerigots, empresa de referencia en el sector quesero en Cataluña, que permitirá maridar los vinos y escumosos de la bodega con una amplia gama de quesos.