VadeVi
El vino catalán pierde Estados Unidos como mercado preferente

Los aranceles de Donald Trump han marcado las exportaciones de este 2025. Si bien es cierto que la actual política arancelaria del gigante americano se ha reducido a un 15% y se han dejado atrás las amenazas de cifras estratosféricas del presidente estadounidense, la realidad es que toda la incertidumbre ha pasado factura a las ventas al exterior. En términos generales, las exportaciones catalanas de vino han caído en los primeros ocho meses de este año, tanto en valor como en volumen. A este dato se le suma un cambio de rumbo: los Estados Unidos ya no serán el mercado predilecto para los vinos catalanes. Los consumidores estadounidenses pasan a la segunda posición y el Reino Unido se alza como el país más implicado en las compras de vinos catalanes. Aunque aún quedan unos meses para cerrar el año y la campaña de Navidad podría hacer volver a girar los datos, parece que después de todo, la gallina de los huevos de oro ya no serán los Estados Unidos.

Siempre que se hablaba de precio y valor de los vinos catalanes en el exterior, los Estados Unidos aparecían como un mercado muy conocedor y amante de los elaborados del país. Los datos del Idescat, demostraban que en 2024, el 12% de todos los vinos catalanes que se exportaban iban a las tiendas, restaurantes y hogares de los estadounidenses. Hacer las Américas era hasta ahora el sueño de todo bodeguero catalán. Sin embargo, los aranceles de Trump hicieron menguar estos objetivos y durante meses, las empresas vitivinícolas catalanas detuvieron sus ventas a EE. UU. por las dudas de todo lo que podrían perder al llegar los aranceles. Estos miedos e incertidumbres se han reflejado en los datos de exportaciones catalanas y han hecho que el Reino Unido se haya posicionado por delante de los estadounidenses en términos de exportaciones en valor. En concreto, el valor de las ventas a los Estados Unidos de los primeros ocho meses de 2024 ascendía hasta los 48.579 euros, mientras que las del Reino Unido quedaban en segunda posición con un total de 44.457 euros. En cambio, este año, los estadounidenses han importado vino catalán por valor de 44.575 euros, y los ingleses han aumentado hasta los 48.403 euros.

Este avance del Reino Unido tiene varias lecturas. La primera -y la más evidente- es la clara afectación que han tenido los aranceles de Trump en el tablero de juego. De esta manera, la prudencia de las bodegas, combinada también con la incertidumbre de las tarifas ha provocado que muchos distribuidores prefirieran esperar a llenar stocks que quizás no venderían. De la misma manera, las bodegas también decidieron esperar a saber con certeza hasta dónde subirían los aranceles para mantener a los estadounidenses en el mercado. Por otra parte, también ha habido un factor de caída de precio. El Reino Unido siempre ha comprado más volumen de vinos catalanes que los Estados Unidos, a pesar de ello, los precios en el mercado estadounidense siempre han sido más altos. Una vez las exportaciones catalanas han perdido fuerza y han caído los volúmenes, los ingleses han comprado menos vino al mismo precio, en cambio, los estadounidenses han comprado menos y a precios más bajos. Este desequilibrio ha sido también uno de los principales causantes del liderazgo del Reino Unido en la venta exterior de vino catalán.

Precios y volúmenes a la baja en 2025

Dejando el nuevo orden de países importadores de vinos catalanes a un lado, la realidad es que estos primeros meses del 2025 no han sido los mejores para Cataluña -tampoco para el estado español-. Según los datos de Idescat, las exportaciones catalanas han caído en volumen y en valor, es decir, se han vendido menos botellas y se ha facturado menos. Los ocho primeros meses de 2024 se facturaron un total de 376.958,9 euros en ventas de vino catalán al extranjero. Una cifra que ha caído un 2,1% (7.756,9 euros) este 2025, en el que se han facturado un total de 369.202 euros. La caída de valor más pronunciada ha sido dedicada a los vinos envasados, que no incluyen los espumosos. En esta categoría, Cataluña ha perdido un 3,5% de su facturación y se ha quedado solo con 128.374 euros, frente a los 132.993 euros que se registraron en el mismo período del año pasado. La misma secuencia se ha visto en el estado español, donde aunque las caídas de las exportaciones generales han sido menos pronunciadas, los vinos envasados del Estado han sido los que más han reducido su valor en estos ocho meses, dejando de facturar 27,7 millones de euros. Esta cifra supone una caída del 8,5% en comparación con 2024.

Copas de vino tinto | cedida

En cuanto al volumen, los datos también confirman una caída de las botellas vendidas al exterior. En este caso, se ha reducido el volumen de vino catalán exportado un 4,4%, es decir, unos 5,19 millones de kilogramos menos. Esta cifra deja las exportaciones en volumen de los ocho primeros meses de 2025 en 115,7 millones de kilogramos cuando en el mismo período de 2024 llegaron hasta los 120,89 kg exportados. Esta caída de volumen ha sido liderada por los vinos espumosos, que han perdido un 7% de sus ventas en volumen al extranjero. Ahora bien, los vinos envasados también han perdido adeptos en términos de volumen, ya que han exportado 1,5 millones menos (4,7%), hasta los 31,75 millones de kilogramos. En el caso del estado español, el volumen de los vinos envasados se ha mantenido equilibrado y ha subido un 0,2% en comparación con 2024. No obstante, la gran caída de precio que han sufrido los vinos envasados españoles en el extranjero ha sido el máximo exponente de las caídas de las exportaciones estatales. Actualmente, el precio del vino español se encuentra en los 1,74 €/litro, 16 céntimos menos que en 2024. Del precio catalán, no se tienen datos actualizados.

Inigualable liderazgo de los espumosos

No es un momento estable para el sector vitivinícola ni dentro ni fuera de Cataluña, pero parece que hay una constante que nunca cambia: los espumosos. Las burbujas son la joya de la corona catalana, las que más se venden al exterior, pero también las que tienen los precios más altos. No es de extrañar, pues, que cuando todo parece caer, los espumosos continúen estables, o incluso crezcan. Esta es precisamente la tendencia de estos elaborados los ocho primeros meses de este año. Si bien es cierto que ha disminuido su volumen de ventas un 7%, un dato más alto que el de los vinos envasados, su facturación se ha elevado un 10%, hasta los 228.305,1 euros. Ante estas cifras, se puede comprobar cómo el precio de los espumosos catalanes al exterior ha continuado incrementándose, tal como ha hecho durante todo el año.

Este aumento, sin embargo, es gracias a los espumosos fuera de DO, ya que según los datos de la Interprofesional del Vino, el cava no pasa por su mejor momento. En concreto, las ventas exteriores de cava se han situado en estos ocho primeros meses de 2025, en 60,6 millones de litros (-9 millones), por valor de 230,8 millones de euros (-11,2 millones). En cambio, las ventas del resto de espumosos han llegado a los 33,5 millones de litros (+6,3 millones), por valor de 89,5 millones € (+12,6 millones). Una tendencia que parece indicar que los extranjeros buscan dar oportunidades a nuevos espumosos y, en el caso de Cataluña, esto apunta hacia Clàssic Penedès y Corpinnat. Sin embargo, los precios medios aún se encuentran por debajo del cava. De esta manera, el precio medio de un cava es de 3,81 euros y el de un espumoso sin DO en el estado español es de 2,68 euros. Del precio medio de los espumosos catalanes en concreto tampoco se tienen datos actualizados.

Nou comentari

Comparteix

Icona de pantalla completa