Raventós i Blanc ha obtenido la certificación B Corp, el reconocimiento internacional que distingue a empresas que cumplen con altos estándares de responsabilidad social, ambiental, gobernanza y transparencia. Cada vez más bodegas catalanas tienen claro que el futuro del sector pasa por la sostenibilidad y Raventós i Blanc ha sido una empresa que abanderaba el cuidado del medio ambiente durante años. Ahora bien, la bodega no había logrado superar las exigencias de la certificación hasta este diciembre, cuando consiguió una puntuación de 114,1, muy por encima del umbral mínimo de 80 puntos necesario para certificarse.
B Corp es un certificado completo, que analiza las empresas desde cinco ámbitos clave: medio ambiente, personas, comunidad, gobernanza e impacto social. Es una certificación estricta y complicada de obtener, ya que es el único sello que demuestra un compromiso constante, con revisiones periódicas y mejoras continuas. En el caso de Raventós i Blanc, destaca una viticultura ecológica y biodinámica, orientada a preservar la vida del suelo y la biodiversidad, así como una gestión del territorio que integra viña, bosque, río y fauna como un único sistema vivo. El uso de animales para labrar, cubiertas vegetales entre las viñas, animales de granja y salvajes que mantienen el ecosistema y un espacio para las abejas son solo algunas de las iniciativas que Pepe Raventós, propietario de la bodega, ha puesto en marcha.
Para el certificado, además, también se han tenido en cuenta criterios vinculados a la manera de organizar el proyecto y de trabajar en el día a día, así como la aplicación de prácticas orientadas a la sostenibilidad, como la reducción de residuos, la optimización de los recursos, el ahorro energético y una gestión responsable de los impactos ambientales asociados a la actividad de la bodega. En otras palabras, B Corp valora no solo que la empresa cuide del ecosistema que la rodea, sino que también haya una preocupación por las emisiones y la energía que se consume dentro de la bodega.
Un impacto para las personas
El certificado B Corp también tiene en cuenta a las personas y su bienestar. No vale tener una empresa comprometida con el medio ambiente que deja de lado las necesidades de su entorno más personal, sean trabajadores, vecinos o ciudadanos. Se trata de buscar empresas que tienen un retorno hacia el planeta, pero también hacia sus habitantes. En cuanto al impacto social, el proceso de certificación ha tenido en cuenta iniciativas como Ciutat Nua, el proyecto solidario de Raventós i Blanc elaborado en colaboración con el centro penitenciario de Can Brians 2. Las ventas de este vino se destinan a cubrir los salarios de las personas que participan en el proyecto, provenientes de Can Brians 2, con el objetivo de fomentar su formación y reinserción laboral.
