VadeVi
Clamor contra las advertencias sanitarias en el alcohol en Irlanda

Los planes de la República de Irlanda de poner advertencias sanitarias en las etiquetas de las botellas de alcohol ha causado un clamor a todo el sector del vino, la cerveza y los licores. Los exportadores de vino han sido los que han hecho más explícita su protesta y, de hecho, han presentado una de oficial ante la Comisión Europea.

Advertencias parecidas a los del tabaco

Según explica ‘Decanter’, el gobierno irlandés quiere que todas las bebidas alcohólicas lleven advertencias parecidas a las del tabaco, apuntando el riesgo de enfermedades hepáticas y de cáncer que se puede derivar de un consumo excesivo. Ante esto, Italia ha sido el país que ha reaccionado con más bastante, con el ministro de Exteriores, Antonio Tajani, tildando el plan de «ataque» a la identidad y la cultura del país.

La Comisión Europea ha recibido una protesta formal contra la regulación irlandesa (CC BY-SA 4.0)
La Comisión Europea ha recibido una protesta formal contra la regulación irlandesa (CC BY-SA 4.0)

Los productores de vino consideran que no es justo comparar el tabaco con el alcohol, que puede disfrutarse con moderación sin efectos perjudiciales a la salud. Es por eso que el Comité Europeo de las Empresas del Vino (CEEV) ha presentado una queja porque la Comisión Europea abre un procedimiento contra el país para infringir las leyes de la Unión Europea y poner en riesgo el mercado común.

La Comisión y la Organización Mundial del Comercio tendrán la última palabra

Según la CEEV, la propuesta irlandesa es «incompatible» con las leyes europeas que «nunca ha justificado bastante». Además, añaden que, como que no distingue entre «el abuso del alcohol y el consumo moderado de vino», esto «no informa correctamente los consumidores». Su secretario general, Ignacio Sánchez Recarte, afirma que está «convencido» que la Comisión Europea tiene la responsabilidad de definir «un marco legal armonizado y científicamente adecuado» para proteger el sector y a la vez informar correctamente los consumidores.

Esta organización, pero, no ha sido la única a mostrar su preocupación: trece estados miembro de la UE lo han hecho y ocho de fuera del mercado común también incluso han advertido de la situación a la Organización Mundial del Comercio. Justamente, después de que la Comisión no rechazara el borrador de esta regulación, esta última organización es la que tiene que aprobarla para garantizar que no es un problema para el comercio internacional.

Més notícies

Nou comentari

Comparteix

Icona de pantalla completa