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Una etiqueta con alma mediterránea para La Scala 2018

El arte y el vino siempre hacen buena pareja. Acompañar la música, el baile o incluso la pintura y la escultura con una copa de vino puede crear un momento de catarsis en cualquiera. Jean Leon se aprovecha de las emociones que afloran al combinar vino y arte para elaborar La Scala, uno de sus vinos más emblemáticos. Este año, las pinturas de la artista Assumpció Mateu -conocida por su pintura de estilo abstracto e intimista vinculada a la naturaleza- ilustran la etiqueta de La Scala Cabernet Sauvignon Gran Reserva 2018, el vino ecológico del Penedès de producción limitada, elaborado únicamente en cosechas excepcionales.

«El cuadro elegido sale de mi colección más Mediterránea», explica la artista gerundense en la presentación del vino. De esta manera, hace un recorrido por toda su vida como pintora, escultora y profesora de arte y recuerda el momento en el que creó la obra que este año es la etiqueta de La Scala de 2018. Para Mateu, la clave de esta colección era tejer puentes y conexiones entre los territorios que bordean el Mediterráneo. La misma artista reconoce que hay países del Mediterráneo oriental que no son tan conocidos: «Quería conectar las culturas, enseñar que todos comparten este mar», describe la artista. Unas obras llenas de colores cálidos y azules marinos que demuestran cómo la técnica de la artista se combina a la perfección con sus emociones para crear obras únicas.

Mateu trabaja con las manos y con productos naturales. Su vínculo con la tierra le viene de su pasado, cuando vivía de cerca la vida de campo. Su conexión con el campo y la impresionante técnica de la artista llevaron a Mireia Torres, directora general de Jean Leon, a visitar su estudio, en Jafre. Se conocieron en el homenaje a otro artista, Gerard Sala, quien ya había ilustrado un La Scala y enseguida notaron que de aquel encuentro podría surgir algo más que las ganas de compartir. «Yo llevé a los pintores», recuerda Mateu, mientras Torres asegura que «llevó el vino». Meses después, en el estudio de Mateu, Torres quedó cautivada por las obras de la artista y con la ayuda de su madre Waltraud Maczassek -también artista- terminaron de seleccionar la etiqueta ganadora.

Mireia Torres, directora general de Jean Leon y Assumpció Mateu, artista y creadora de la obra de la nueva etiqueta de La Scala 2018 / Cedida
Mireia Torres, directora general de Jean Leon y Assumpció Mateu, artista y creadora de la obra de la nueva etiqueta de La Scala 2018 / Cedida

Una obra excepcional para un vino singular

La obra elegida es una oda a la esencia y riqueza cultural del Mediterráneo, llamada Ponts de l’ànima: Mediterrani. Mateu fusiona caligrafías y vestigios ancestrales a través del símbolo del puente, que representa la unión y el diálogo entre culturas, donde los tonos azul marino y los colores tierra se vuelven protagonistas. Utiliza la técnica mixta, mezclando fotografía, pintura y papel, y texturas matéricas de pigmentos naturales, acrílicos y polvo de mármol que dotan su creación de un aura de misterio y belleza sublime. Según Torres, esta obra encaja con el vino que salió de la cosecha 2018 y también mantiene viva la tradición de unir arte con vino: “Vinya La Scala representa nuestro compromiso con la excelencia y la creatividad. La colaboración con artistas como Assumpció Mateu nos permite expresar, a través de cada añada, la profunda conexión entre el mundo del vino y el arte, dos lenguajes universales que comparten sensibilidad, emoción y capacidad de perdurar en el tiempo”, confirma la directora general de Jean Leon.

Certificado como Vino de Finca Calificada, Jean Leon Vinya La Scala se elabora a partir del cabernet sauvignon procedente de una parcela de suelos arcillo-calcáreos de ocho hectáreas, plantada en 1963 por Jean Leon y el enólogo Jaume Rovira. Según explican desde la misma bodega, la añada 2018 estuvo marcada por las lluvias, con una primavera fresca y húmeda y un verano cálido. Elaborado por la enóloga Montse Escoté, el vino envejece 24 meses en barricas de roble francés, seguido de una crianza mínima de tres años en botella. El resultado es un vino intenso y profundo en nariz, con predominio de aromas a frutos negros maduros, elegantes notas especiadas y matices balsámicos que le aportan frescura y complejidad. Su distintivo fondo de tostados, resultado de la crianza en barrica, enriquece el conjunto aromático y le confiere sofisticación. En boca se muestra untuoso y concentrado, con taninos redondos y bien integrados que realzan su equilibrio y estructura. Además, del equilibrio que describen desde la bodega, la añada 2018 ha sido reconocida con 95 puntos por la Guía Gourmets y 93 puntos por el prescriptor James Suckling y ha obtenido Medalla de Oro en el certamen internacional Mundus Vini.

Una profunda relación entre vino y arte

Desde los años noventa, la bodega de Familia Torres acompaña las botellas de este vino con una obra de algún artista y convierte cada botella en una pieza coleccionable que rinde homenaje al restaurante La Scala de Beverly Hills, regentado por Jean Leon y convertido en punto de encuentro de las grandes estrellas de Hollywood de los años cincuenta y sesenta. Artistas como Josep Maria Subirachs, Antoni Tàpies, Joan Hernández Pijuán, la misma Waltraud Maczassek, Javier Mariscal, Josep Guinovart o August Rosell, entre otros, han dejado «su huella en este gran reserva, símbolo incuestionable de la simbiosis entre el vino y el arte», aseguran desde Jean Leon.

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